En el año 2000 iniciamos nuestra colaboración en el mantenimiento de un comedor infantil y desde el 2010, en un dispensario en la ciudad de Granada, Nicaragua.
En el año 2007 iniciamos también una colaboración en el Chad, apoyando actividades de formación en la diócesis de Laï, y también (poco después) en un centro de acogida para niños de la calle.
Igualmente colaboramos con una parroquia de Paraguay y otra de Egipto.
En el año 2014 recibimos una llamada especial, a la que respondimos con generosidad y gratitud: la colaboración para que en cinco campamentos de refugiados del Chad, más de 37.000 niños de preescolar y primaria, puedan ser escolarizados.
Las aportaciones para estas obras provienen de donativos particulares, de la campaña de adviento y navidad, de las limosnas en el cepillo de la iglesia durante la cuaresma y la pascua y sobre todo, del fruto de nuestra austeridad cuaresmal compartido con nuestros hermanos más necesitados.
La generosidad se tornará alegría para nosotros y nuestros hermanos.
Los donativos se pueden entregar personalmente en cualquier momento.
En nombre de quienes se beneficiarán de nuestra generosidad, muchas gracias.